Qué puedo hacer como familiar I: No tengas miedo y cuídate
- riseelu2018
- 30 may 2018
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 31 may 2018

No tengas miedo y cuídate
Durante la enfermedad os vais a enfrentar a situaciones únicas que se dan en la persona que más queréis en este mundo. No vais a comprender del todo la enfermedad, os va a frustrar el hecho de que en muchas ocasiones sólo vais a poder acompañar. Todos los sentimientos de pena, impotencia, rabia, tristeza, miedo son normales y hasta sanos. Es una situación muy traumática y la mayoría de los padres que pasan por esta circunstancia se olvidan de que aunque los niños son el centro de la enfermedad, la vida sigue, y como padre tienes que acordarte de comer, dormir, trabajar, atender a tus otros hijos si los tienes y hasta divertirte.
Todos los sentimientos de pena, impotencia, rabia, tristeza, miedo son normales y hasta sanos.
Estas recomendaciones pueden parecer muy obvias, pero en la mayoría de familias en las que se vive esta situación traumática surgen crisis personales y familiares, y considerando lo difícil que es la situación de por sí, si quieres evitar estos problemas, tente en cuenta. Sólo si estás descansado, nutrido e incluso de buen humor es cuando puedes transmitir la positividad a tu hijo, a la par que darle el mejor cuidado que necesita.
Con respecto a los hermanos y otros familiares, sobre todo los más cercanos (el caso de abuelos que viven con los padres, etc), es bastante común que ocurran dos tipos de reacciones: la incomprensión, producto de una falta de información, y la sensación de abandono.
Para lidiar con la incomprensión es importante que te acuerdes de que aunque tú como padre te pasas el día hablando con los médicos, tus otros hijos, pueden no estar al corriente de todo, pueden no entender lo que está ocurriendo tan bien como tú, y, sobre todo, necesitan hablar de ello. Por ello, es muy importante que os acordéis de los hijos sanos, que les mantengáis al tanto permanentemente de la situación, que seáis lo más optimistas posibles y que contestéis a sus preguntas con sinceridad. Es importante que los hermanos no pierdan la relación, así que hay que intentar que aunque sea duro para ellos, les visiten con frecuencia.
Por último, es bastante común que los hermanos sanos se sientan abandonados. Aunque cueste muchísimo, es necesario comprender que tus hijos siguen con sus vidas, siguen yendo al colegio y siguen teniendo los mismos entrenamientos de fútbol o clases de guitarra que tenían antes. El hecho de que los padres estén permanentemente en el hospital o pendientes mentalmente del hijo hospitalizado suele producir una sensación de abandono y celos a los otros hermanos. En la medida que sea posible, intenta turnarte con otros familiares para asegurar que tienes tiempo que dedicarle a los hermanos, que sigues ahí para ellos.
Comments